1 ago 2016

Simone de Beauvoir: "Ciertamente, la violencia existe. Un hombre es, a la vez, libertad y facticidad. Es libre, pero no con esa libertad abstracta que predicaban los estoicos: es libre en situación. Hay que distinguir aquí, como nos lo sugiere Descartes, su libertad y su potencia: su potencia es finita, y se puede desde afuera aumentarla o restringirla; se puede llevar a un hombre a la cárcel o sacarlo de ella, cortarle un brazo, prestarle alas, pero su libertad permanece infinita en todos los casos. El automóvil y el avión no cambian nada a nuestra libertad, y las cadenas del esclavo no cambian nada tampoco: libremente se deja morir o reúne fuerzas para vivir, libremente se resigna o se rebela, siempre se supera. Es sólo sobre la facticidad del hombre, sobre su exterior, que puede actuar la violencia. Aunque la violencia lo tenga en su impulso hacia sus fines, no lo alcanza en el corazón de sí mismo; pues es aún libre frente al fin que se ha propuesto" («¿Para qué la acción?»; Buenos Aires: La Pléyade, 1972 [1944], páginas 90-91).

No hay comentarios:

Publicar un comentario