5 may 2016
Michael Oakeshott: "La inseparabilidad de aprendizaje y condición humana es fundamental para nuestra comprensión de nosotros mismos. Significa que ninguno de nosotros nace humano; cada uno es lo que aprende a ser. Significa que lo que caracteriza a un hombre es lo que aprendió a percibir, pensar y hacer, y que las importantes diferencias entre los distintos seres humanos son diferencias que están relacionadas con lo que cada uno aprendió. Hay pocas dudas de que nuestra capacidad de aprender ha aumentado durante el último millón de años aproximadamente y de que esa capacidad es mayor en determinados momentos de la vida de cada individuo. Es posible que también existan algunas diferencias genéticas en la capacidad de aprender que tiene cada uno. Sin embargo, la importancia humana de esos cambios y esas diferencias radica sólo en el hecho de que reflejan lo que un hombre aprendió a pensar, imaginar y hacer; porque eso es lo que él es" («La voz del aprendizaje liberal»; Buenos Aires: Katz, 2009 [1989], páginas 39-40).
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