La natura y la cultura es un curso que ilumina al mundo de hoy, que responde al gran problema del Multiculturalismo, dando una comprensión detallada sobre el modo en que se piensa hoy la cultura.Esta comprensión que se ofrece esta coordinada activamente en un sentido histórico, antropológico, ético y critico. Con el fin de pensar y valorar la cultura con honestidad intelectual, en un ámbito abierto a la trascendencia y al dialogo con otras posiciones.
La cultura como “habitus”, se puede tomar en dos sentidos como costumbre o repetición, se necesita diferenciarlo del predicamento o categoría de la cualidad Aristotélica, el sentido es la manera de ser del sujeto, en modo transitivo significa “poseer alguna cosa”. Es decir la determinación accidental intrínseca de la sustancia. La manera de ser no es estable, en vía de perfeccionamiento, contiene una disposición. Si la determinación es estable, es mas perfecta, difícilmente mutable (qualitas de dificili mobili, S. T. I –II q. 49 a. 4). Esta perfección se da en tres sentidos:
1. Verso el sujeto el habitus recive una cualificación, determinación (habitus entitativi).
2. Se fundamenta en la anterior, que indica el elemento finalistico en la actividad del sujeto (ad aliquid aliud)
3. Es como virtud, el perfeccionamiento con el cual se cumple el acto[1].Partiendo de este significado, puedo comprender la cultura fundada sobre la natura humana, la persona.
2. Se fundamenta en la anterior, que indica el elemento finalistico en la actividad del sujeto (ad aliquid aliud)
3. Es como virtud, el perfeccionamiento con el cual se cumple el acto[1].Partiendo de este significado, puedo comprender la cultura fundada sobre la natura humana, la persona.
Para sistematizar un desarrollo histórico de la cultura y adaptar la formula tomista al pensamiento de hoy.
El Card. Biffi comprende el significado de cultura y dice que son innumerables las definiciones de cultura, es como un bosque en el que es fácil perderse. En otras palabras estar atento a la confusion y a la ambigüedad.
El mundo clásico tiene una heredad irrenunciable, que propone el cultivo de la interioridad en el hombre, mediante valores absolutos (lo bueno, lo bello, lo verdadero y lo justo), el concepto luego se amplia a la cultivación del hombre, como patrimonio de verdad, rectitud y belleza en una persona.
Cuando se valora la idea de nación, pueblo y país, el termino toma dimensión colectiva, y se habla de cultura como comunidad humana, en escuelas e institutos de búsqueda dando una producción filosófica, literaria, jurídica, artística y musical. En el siglo XIX se comprende la cultura como patrimonio, desde la etnologia y la antropología, un reagrupamiento humano, un comportamiento en todos los campos, que se posee a nombre de patrimonio. Aquí se puede hablar ya de una cultura campesina y otra obrera.
En el siglo XX ya es un sistema concordado de valoración de las ideas, actos, eventos que son complejos o socialmente aceptados. En este sentido cada cultura supone una especifica jerarquía de valores propuesta y aceptada[2]; por esto se justifica el ver los principales momentos de la historia del pensamiento, en el que se manifiesta la perdida progresiva de la natura y el modo de entender la cultura. Dado en tres sentidos por el Card Biffi.
ANDRES CARDENAS PBRO.
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